Pasaron cuatro meses y 11 días para que el arquero Hugo Hernández por fin pudiera volver a realizar un entrenamiento de alta exigencia integrado al equipo del Guadalajara comandado por José Luis Real, luego de recuperarse completamente de la fractura en el hombro izquierdo que sufrió durante un entrenamiento en Verde Valle el pasado mes de abril.
El escenario de su regreso a las prácticas rojiblancas es otro, la cancha del Estadio Omnilife, nueva casa del Rebaño que este sábado recibirá a los Pumas de la UNAM en duelo correspondiente a la Jornada Seis del Apertura del Futbol Mexicano. El joven arquero rojiblanco lució feliz junto a Luis Valls, entrenador de porteros de Chivas, y no era para menos, luego de un largo prolongado periodo de inactividad donde por momentos navegó en las aguas de la ansiedad, entre su rehabilitación y la espera de un regreso por fin consumado.
Hugo Hernández nunca perdió la fe en Dios, a quien eleva su agradecimiento por permitirle seguir haciendo lo que le gusta que es jugar al futbol y sobre todo desde la posición que lo atrapó desde su proceso de Fuerzas Básicas: la portería, sitio que ha cubierto de buena manera Sergio Arias, segundo de abordo en la cabaña, detrás de Luis Ernesto Michel.
“Gracias a Dios ya pasamos lo más difícil y ahora ya nos estamos incorporando con el equipo, haciendo los trabajos de arquero, circuitos y espacios reducidos y muy contento la verdad, como dije agradecido con Dios que me vuelve a dar la oportunidad de hacer lo que más me gusta que es jugar futbol desde la portería”, afirmó Hugo Hernández.
La inyección de ánimo para el arquero nacido en Zamora, Michoacán se produjo al momento de no presentar ningún tipo de molestia en su hombro izquierdo durante el fuerte impacto con el balón en los disparos enviados por los jugadores del Guadalajara.
“No he tenido ninguna molestia me he sentido bien. Creo que hay que ir paso a paso y pues me parece que lo he hecho bien. Ahora es precisamente lo que necesito, tener el contacto con los jugadores, con el balón y en los disparos”, apuntó el arquero de Chivas.
Ahora el objetivo primordial de Hugo Hernández es recolectar toda la confianza posible durante los trabajos y entrenamientos impuestos por Luis Valls, entrenador de porteros del primer equipo del Rebaño, pues guardametas como Sergio Arias y todo el puñado de porteros que vienen haciendo un buen trabajo en las divisiones inferiores rojiblancas crean una sana competencia deportiva por un lugar en el Máximo Circuito.
“Ahora voy a adquirir confianza trabajando con Luis Valls, para después poder trasmitirla en un partido o en un espacio reducido, que puede ser lo más cercano a un encuentro. Tengo que estar al 100 por ciento, porque Sergio Arias hizo un buen trabajo, y en general todos los porteros de Chivas están haciendo un buen trabajo en sus categorías, porque todos quieren llegar a Primera División y no quiero quedarme fuera”, declara determinado Hugo Hernández.
Por lo pronto, Hugo Hernández ha fortalecido la cualidad de la paciencia desde fuera del terreno de juego, máximo aprendizaje que obtuvo a raíz de su delicada lesión, por lo que consciente de que se ha formado claros objetivos que nadie podrá arrebatarle pretende mantenerse vigente en el lugar por el que siempre ha luchado en el plantel de Primera División.
“Me dolió mucho lo que me pasó, por todo lo que estaba cerca, una Liguilla, la (Copa Santander) Libertadores, pero con el tiempo tuve que ver mi realidad, que era que me había lesionado y debía recuperarme. Es difícil sacar algo bueno de una situación así, pero yo fortalecí mi paciencia. Ahora sé que los objetivos que yo tengo son sólo míos y nadie puede quitármelos y mientras tenga paciencia, trabaje y sea perseverante puedo llegar a donde quiero estar que es jugar en Primera División”, remata Víctor Hugo Hernández Oropeza.