En el ambiente de pretemporada de Chivas Sub 17 los aires de una fuerte, sana e intensa lucha deportiva por el puesto comienzan a soplar en el campamento del cuadro dirigido por Ramón Baeza y para el centro delantero rojiblanco, Carlos Ernesto Cisneros la oportunidad de competir por la posición aparece a la vista con miras al Torneo Clausura 2011 de la categoría.
Aunque en general el atacante rojiblanco consideró bueno su desempeño en relación a los minutos que tuvo dentro de la cancha, pues en 635 minutos consiguió cuatro anotaciones durante el Apertura 2010, sabe también que el momento de despuntar y buscar mayor margen para la constancia está a la vuelta de la esquina en el siguiente torneo.
“En general en el futbol de México se encuentran muy pocos jugadores con características de nueve clavado, de esos ‘caza goles’ como dicen, y la pretemporada va a ser intensa y corta por eso el equipo y yo estamos haciendo el mejor esfuerzo para llegar a tope al inicio de la temporada y poder ganarnos un lugar”, indicó Carlos Cisneros.
La intensidad tiene que manifestarse en cada entrenamiento, pues el jugador que se duerme en sus laureles puede ser desbancado por otro compañero, por eso la pretemporada también se trata de saber responder a cualquier situación favorable que se presente.
“La exigencia en cada posición es muy fuerte y exigente cada día y si no te encuentras al 100 por ciento, hay otro jugador que te puede suplir sin problema para jugar cada partido que es lo más importante dentro del torneo”, aseguró el atacante rojiblanco.
Previo a engrosar las filas del Guadalajara Sub 17, Carlos Cisneros pasó por la experiencia de formar parte de las filas del conjunto de la Escuela de Futbol Chivas, proceso qie le ayudó a valorar muchas cosas, y a darse cuenta de que la carrera futbolística debe someterse a todo tipo de pruebas para al final de cuentas salir adelante.
“Sí, me tocó ir a jugar con la Escuela de Futbol, donde todo te hace valorar lo que significa estar en Fuerzas Básicas ahora que volví el torneo pasado me costó un poco adaptarme a los entrenamientos pero después todo fue normal, y el entrenador y los compañeros me ayudaron a sentirme en confianza con el grupo”, finalizó Carlos Ernesto Cisneros Barajas.
