Roberto Francisco Godínez Rodríguez ha sostenido una lucha por su vida desde su nacimiento, a él le fue diagnosticado Mielomeningosele (que es una malformación del sistema nervioso central de origen congénito. Hay una alteración en la formación de una vértebra (Espina Bífida) y esto afecta a la médula y a sus envolturas. Puede ocurrir en la columna cervical, dorsal o lumbar), pero poseen una asombrosa fuerza de voluntad a prueba de todo y todos, una envidiable constancia en la persecución de sus metas, por lo que a sus 33 años, es un guerrero.
A los cinco meses le fue colocada una válvula de Pudens, que hasta el momento su cuerpo no ha rechazado, a raíz de esta enfermedad le han realizado 19 cirugías, la última hace un año, en la que le colocaron cuatro tornillos en su tobillo, ha tenido muchas complicaciones pero continúa luchando por querer salir adelante.
Desde pequeño mostró una gran determinación por los colores rojiblancos, su padre, Francisco Godínez, inculcó en el pequeño una gran afición por el Rebaño Sagrado, en su pasado cumpleaños, las invitaciones para la fiesta contenían una semblanza de la difícil vida que ha tenido que superar, en la que apareció una foto en donde desde muy chico ya portaba con orgullo la playera del Guadalajara, y pierdan o ganan el es chiva a morir, y una ilusión que tenía era conocer a los jugadores del actual plantel.
Beto, como le dicen de cariño, recibió la invitación de parte de los dirigentes de la Escuela Chivas del Valle, de Tala, Jalisco, para cumplir con uno de sus sueños, y desde que llegó a las instalaciones de Verde Valle, la sonrisa fue su fiel acompañante durante su estancia en el redil rojiblanco. Para él fue una sorpresa, pues en su cumpleaños le prometieron que lo traerían a conocer y convivir con el plantel de Chivas y hoy cumplieron con ella.
Mientras observaba el entrenamiento del Rebaño, el Presidente Deportivo Juan Manuel Herrero y el Director de Desarrollo Deportivo de Chivas, le dieron la bienvenida al joven aficionado y le obsequiaron una playera del Primer Equipo, que utilizó para recopilar las firmas de todos los jugadores al final del entrenamiento de este viernes.
Al finalizar el entrenamiento, lo jugadores del Rebaño se acercaron a Beto para saludarlo y convivir un momento con él, pero el momento cumbre llegó cuando el capitán del Guadalajara, Omar Bravo, se acercó a él y platicaron por unos momentos, y el joven le dijo “hay que ganar mañana”, a lo que el delantero rojiblanco le contestó “claro que vamos a ganar, ¿tú lo dudas? porque yo no”, a lo que el aficionado respondió “no, no lo dudo”.
Beto es un ejemplo de fortaleza y de ganas de salir adelante, porque esta enfermedad le ha traído muchas complicaciones, pero en nunca se ha dado por vencido, siempre trata de salir adelante y ese ejemplo lo transmite a la gente que le rodea y sobre todo a los niños, porque aunque no tiene la posibilidad de pegarle a una pelota, anima a los niños a que le echen ganas para alcanzar sus metas.
