Ciudad de México.- Dicen los puristas del futbol que son justo los partidos de trascendencia mayúscula como los Clásicos Nacionales los que suelen erigir a los héroes que con su actuación impulsan a su equipo a vencer a su acérrimo adversario y en esta ocasión le tocó esa suerte al portero Antonio Rodríguez, quien se encargó de tapar el tiro definitivo en la tanda de penales y con ello ayudó a que Chivas se instalara en la Final de la Copa MX del Torneo de Apertura 2016.
Además de haber atajado un tiro directo de Michael Arroyo que había sido desviado en el trayecto, cuando el encuentro se encontraba en su agonía y con el marcador empatado a uno, ‘Toño’ se plantó firme sobre la línea de la meta ante el quinto intento azulcrema, ejecutado por Osmar Mares, y con la pierna derecha desvió el potente envío del mediocampista de las Águilas, con lo que selló el triunfo rojiblanco por 3-4 en dicha tanda y con ello propició que hubiera justicia deportiva, ya que el Rebaño Sagrado fue el que propuso todo el encuentro y buscó el resultado.
