Su visión en el terreno de juego, creatividad en la media cancha y efectividad en la zona de definición han sido factores que han convertido a Zahid Yibram Muñoz López en uno de los jugadores más importantes para que el Guadalajara Sub 17 se mantenga como un cuadro muy sólido en el Torneo de Apertura 2018, en el cual marcha como segundo lugar de la tabla. Curiosamente, el actual líder de goleo del campeonato no tenía el futbol en su horizonte cuando era más pequeño, pero gracias a su hermano se encaminó en esta profesión y además le inculcó la identidad rojiblanca.
“De niño nunca pensé en jugar, le tomé cariño al futbol por mi hermano, a los 4 años en un entrenamiento me dijo que si jugaba con él, a mí no me gustaba, pero de ahí en adelante le tomé gusto al futbol y nació mi amor por Chivas. Mis inicios fueron en la escuela, con mis compañeros hacíamos retas y lo empecé a tomar más en serio; mi primer equipo fue en Acatic, mis papás me llevaban a entrenar y los fines de semana íbamos a Tepatitlán a jugar. Yo comencé de extremo, después me hicieron 9 y luego de medio y desde entonces me quedé en esa posición”, expuso el volante tapatío.
“Mi hermano venía a entrenar a La Gigantera y un día un profe le preguntó a mi mamá que si yo quería entrenar, yo no quería, me daba pena, pero me convencieron de jugar y desde entonces me puse la playera rojiblanca. Estuve un año ahí antes de pasar a Fuerzas Básicas, cuando se abrió la categoría 2001 todos venimos a hacer visorías y me quedé", añadió.
El joven mediocampista llegó al redil a los 6 años y desde entonces ha forjado su proceso de formación en todas las divisiones del Rebaño Sagrado, además de que ha tenido la oportunidad de defender el escudo del equipo más popular y querido de México en torneos internacionales en Sudamérica y Europa, y ha conseguido reconocimientos personales que avalan su calidad como futbolista.
“Llegué a la Décima División y he ido escalando, mi primer torneo importante fue en Sub 13 y quedamos Campeones, después Sub 15 y Sub 17. He representado a Chivas en Inglaterra, España, Brasil, República Checa, Italia, Portugal e Irlanda, pero los dos últimos me marcaron porque en la Iber Cup 2014 fuimos Campeones al ganarle al Sporting de Lisboa en penales y fue algo muy bonito porque conseguimos algo que nadie pensó que haríamos, y en la Milk Cup 2016 me nombraron el mejor jugador del torneo y es muy especial que te reconozcan en otro país”, refirió.
El desarrollo que el oriundo de Tepatitlán, Jalisco, ha tenido durante su estancia en la #CanteraRojiblanca ha sido evidente gracias al trabajo, al esfuerzo y compromiso con el que se prepara día a día para conseguir sus objetivos y acercarse a cumplir el sueño de debutar en el Primer Equipo, para lo cual es consciente de que deberá de tener paciencia para completar su formación y llegar mejor preparado para cuando llegue tal oportunidad.
“Creo que voy por buen camino, con constancia y trabajo fuerte las cosas se van a dar, espero muy pronto estar en Primera División. He mejorado bastante y se ha visto en los partidos, siento que he madurado mucho porque elijo mejor, sé que hacer con y sin balón, tomo mejores decisiones al momento de jugar y la verdad nunca lo había visto como una responsabilidad, yo solamente disfruto el juego y ahí se van dando las cosas, me ha tocado meter goles, tener asistencias y eso es un reto para mí”, indicó.
“Uno de mis objetivos es quedar campeón goleador y llamar la atención del cuerpo técnico de Primera División para luego hacer una Pretemporada con ellos, sé que me falta aprender algunas cosas para terminar mi formación y llegar más completo al máximo circuito”, aseveró.
Como es habitual en las categorías de formación, el futbol requiere muchos esfuerzos y sacrificios y al igual que muchos jóvenes futbolistas de su edad el volante ofensivo del Guadalajara Sub 17 tuvo que adaptarse al hecho de estar lejos de sus seres queridos, lo cual con el tiempo se ha convertido en una de sus fuentes de inspiración para destacar y colaborar a que el equipo en el que esté triunfe y sume éxitos para el club.
“Estar lejos de mi familia (mi papá Gibran Muñoz, mi mamá Alejandra López y mis hermanos Narbiy y Seiny) es lo más difícil porque soy muy apegado a ellos, siempre hacía todo con mis hermanos y no estar con ellos a veces pega, más con mi hermanita porque no la veo muy seguido, pero la vida en la casa club sí me gusta porque están todos mis compañeros, hay un buen ambiente y estar cerca de lo que te gusta hacer que es jugar futbol. Quiero sobresalir en el futbol para ayudar y sacar adelante a mi familia, porque no son fáciles las cosas, la motivación es ver a mi familia bien”, concluyó Zahid Muñoz.
