En la periferia de la ciudad de Phoenix, por la carretera interestatal número 10, que aproximadamente cinco horas más de trayecto hacia el oeste desemboca en la urbe de Los Ángeles, los indicativos de la población de Glendale que anuncian el University of Phoenix Stadium son igual de constantes que los autos con placas y destino de California.
Luego de girar hacia la derecha con rumbo norte hacia los territorios de la máxima casa de estudios del estado de Arizona, a la distancia es perceptible un gigantesco edificio que se erige por encima del las ostentosas y pintorescas viviendas de uno de los suburbios residenciales de Phoenix.
El gris deslumbrante que roba la atención y que invita a mirarlo una y otra vez para apreciar su imponente diseño y respetables dimensiones, son las principales cualidades que simple vista confirman que se está ante la presencia de uno de los estadios más funcionales y modernos del mundo, el University of Phoenix Stadium.
Las miradas de asombro en los elementos de Chivas no son de extrañarse, pues aunque es la segunda ocasión en que el equipo visita este inmueble, lo llamativo, modernista y espectacular de su construcción asombra cuantas veces se le mire.
Anunciado como uno de los eventos esperados en la presente semana en la ciudad, la expectación por el duelo entre Chivas y Red Bulls la confirman las decenas de medios de comunicación, latinos y estadounidenses que se han dado cita en la Conferencia de Prensa de presentación del partido, quienes también han aprovechado que ambos equipos desarrollaron su práctica y reconocimiento del campo el día previo al encuentro.
Con un característico plantel joven, pero que de igual manera arrancan ovaciones por parte de los jóvenes de una de las escuelas filiales de Chivas en Phoenix que se dio cita en el inmueble, Chivas ha constatado que la cancha del modernista estadio le favorece.
Pues con un césped natural, raso y de buenas hechuras, que facilita el rápido desplazamiento de la pelota, Guadalajara ha encontrado al aliado número uno de su juego vertical y profundo, de toques certeros y fugaces que tanto daño provocan en las defensivas enemigas.
Y aunque es de esperarse, el segundo aliado del equipo más popular de México lo encontrará en las tribunas, en los miles de aficionados rojiblancos que tanto de Phoenix, como de otros puntos circunvecinos, acudirán a la cita deportiva para aprovechar lo que pocas ocasiones en el año pueden tener, al Rebaño Sagrado de cerca y en un partido ante un sinodal complicado.
