Los Cabos, Baja California.-Para travesía, la de Chivas Rayadas para llegar este viernes a Los Cabos, Baja California para cumplir con el compromiso correspondiente a la Jornada 13 del Torneo Bicentenario 2010 de la Segunda División ante Delfines de Los Cabos a efectuarse en la Unidad Deportiva de Los Cabos este sábado en punto de las 15:00 horas.
El periplo rojiblanco arrancó en punto de las 7:00 horas con la ida al Aeropuerto Internacional Miguel Hidalgo de Guadalajara con destino Los Cabos escala en el paradisiaco Puerto de Los Cabos. Destilando juventud, el cuadro dirigido por Javier Hernández sólo presenta a cinco elementos de "experiencia", Alejandro Galván, Alan Ramírez, Eduardo Rivera, Christian Morán y Hugo López, el resto una mezcla de elementos del Guadalajara Sub-17 e incluso de las Chivas de Tercera División.
Sin contratiempos llegó el anunciado aterrizaje en la ciudad de Tijuana, y ahí comenzó la espera, cuatro horas debieron pasar para esperar el siguiente avión que los llevaría a su destino final. Siguieron entonces las distintas maneras de pasar el tiempo, desde el Director Técnico Javier Hernández, quien debía separarse del grupo en innumerables ocasiones para atender el teléfono, comprensible la noticia del paso de su hijo "Chícharito" al futbol europeo con el Manchester, aún permanece fresca para muchos, Jorge López, el entrenador de porteros quien no dejaba de animar a los dos noveles guardametas,Jorge Reyas y Christian López quienes se presentarán con Chivas Rayadas este sábado.
El delantero Gabriel Gutiérrez, originario de Tijuana aprovechó la larga espera para recibir la visita de su familia en las propias afueras del aeropuerto tijuanense, el grosor del grupo jugando a las cartas en cualquier sitio donde existe la posibilidad, algo que se ha vuelto una tradición en las concentraciones de Chivas Rayadas.
Aunque se trata del último encuentro de la fase regular, este juego se debe tomar con seriedad, de inmediato en el hotel de concentración, a ponerse el uniforme de entrenamiento, sacar cualquier estrago que pueda causar el largo viaje con una sesión de trabajo, pues hay que cumplir como siempre dentro de la cancha, que alrededor sólo adornan anécdotas.
