Para el defensa del Guadalajara Sub 17, Edwin Jesús Mojarro Sánchez, la pretemporada que está realizando es una de las mejores que ha hecho desde que está en la institución rojiblanca, y agregó que a pesar de que son entrenamientos muy fuertes en el aspecto físico, con disposición y actitud todo se puede lograr.
“Creo que ha sido una de mis mejores pretemporadas aquí en Chivas, me siento a gusto y contento de trabajar con el grupo. Son cargas muy pesadas pero creo que con disposición y actitud todo se puede, el equipo trabaja al 100mpor ciento y ninguno se queja”.
“Este trabajo es a conciencia, no es nada más por nomás, y creo que es la base importante para hacer un buen torneo”, afirmo muy convencido de sus palabras el jugador tapatío.
El zaguero rojiblanco es uno de los jóvenes que ya ha tenido la experiencia de jugar en esta categoría, por lo que asume con responsabilidad este papel, pues está dispuesto a apoyar a sus compañeros, sobre todo a los que llegan por primera vez a este equipo, por lo que buscará que se integren rápidamente para que sobresalga todo el grupo.
“Creo que tengo una responsabilidad muy grande junto a la de mis otros compañeros, no nada más soy yo, somos un equipo y cuentan todos, pero creo que es una responsabilidad que me hace comprometerme más con el equipo. Ayudar a los compañeros, a los novatos que ahí vienen, ayudarlos y sobresalir todos juntos”, explicó el jugador Sub 17.
El defensor del Rebaño Sub 17, comentó que volver a trabajar con Manuel Martínez es una gran experiencia para él, pues el técnico rojiblanco los motiva a dar el extra y a trabajar con mucha intensidad bajo cualquier circunstancia, además de que es alguien a quien día con día se le puede aprende algo.
“Creo que es una gran experiencia, porque siempre te hace querer más y te da esas ganas de querer más y sobresalir a pesar de todo lo que esté pasando y es algo muy bonito es un entrenador buenísimo. Día con día tienes que aprenderle algo, siempre te enseña algo nuevo, siempre está tratando de que aprendas algo nuevo”, concluyó Edwin Mojarro.
